Nativa de Barbados y explorando sonidos neo-soul que se funden con el jazz, Marisa Lindsay nos acaricia los sentidos con su segundo disco titulado "Deeper Love". Ella se siente muy influenciada por grandes artistas como Natalie Cole, Aretha Franklin o Billie Holiday, pero ha sabido imponer su frescura y personalidad con fragancias sonoras de extrema dulzura que nos envuelven y atrapan de manera natural, dando como resultado un trabajo digno de una mujer de gran talento como es ella. Una muestra de ese trabajo es "I Think I Want to be in Love", con ciertas reminiscencias al grupo de acidjazz Incognito -o por lo menos a mi me lo parece-, una agradable forma de sumergerse en su placton sonoro.
